La indemnización del despido tributará en el IRPF tras la reforma fiscal en la que trabaja el Gobierno de Mariano Rajoy. De modo que, Hacienda quiere extender la tributación a todos los despidos y no sólo a aquellos que no lleguen a conciliación como hasta ahora.
La inclusión de la indemnización por despido el IRPF entraría en vigor en 2015 y contaría con un mínimo exento, según recoge hoy el periódico económico Expansión. Con lo que Hacienda limita las deducciones y pretende compensa la caída de ingresos fiscales por la rebaja del Impuesto sobre la Renta que ultima Gobierno. La cuantía media de la indemnización por despido ronda los 10.000 euros, pero depende de muchos factores como el salario, la antigüedad y de la legislación vigente en el momento en que se produzca el despido.
Desde 2013, el Gobierno ha introducido un mecanismo progresivo para penalizar la retribución variable y las rentas irregulares, para atacar los blindajes de los altos directivos. Así se aplicaban una reducción del 40% en los primeros 300.000 euros y el resto tributaba al tipo máximo. Si la indemnización está entre 700.000 euros y un millón, la reducción del 40% se aplica a la diferencia entre la cuantía de la indemnización y 700 000 euros, el resto tributa al tipo marginal. Las indemnizaciones superiores al millón tributan al tipo máximo.
La indemnización por despido en España en 2013 toca fondo tras la reforma laboral.
En la reforma propuesta por los expertos de la Comisión Lagares creen que los despidos por causas económicas tributen sin ningún tope. En este sentido señalan que, si el despido es improcedente, la mayor indemnización ya supone un beneficio extra. En el caso de que todos los despidos tributaran, el Fisco recaudaría más 1.000 millones de euros al año.